Más de 150 moteros de toda la provincia se concentraron ayer frente a la Subdelegación del Gobierno para reivindicar mayor seguridad vial en las carreteras. La movilización, que superó las previsiones iniciales de la organización, coincidió con otras manifestaciones organizadas en el resto de capitales de provincia del país.
El aparcamiento de Las Pallas fue el punto de partida de la marcha reivindicativa, para hacer después un pequeño recorrido por las calles de la ciudad hasta terminar frente al edificio de la Subdelegación del Gobierno. Hasta allí acudieron amantes del motor no sólo de Zamora capital, sino también de Benavente, Toro y otros pueblos del mapa provincial.
La protección de los guardarraíles y la instalación de sistemas de resguardo para motoristas en los actuales artilugios de contención de vehículos constituyen la bandera de la lucha del colectivo. Los conocidos como quitamiedos «mutilan y matan» a muchos compañeros, explica Julio de Mena, integrante de la plataforma motera para la seguridad, si bien las carreteras de la provincia no han registrado por el momento ninguna muerte por este motivo, «aunque sí mutilaciones», explica el motero zamorano.
La vieja reivindicación de los aficionados a las dos ruedas ha caído hasta el momento en saco roto por parte de las administraciones, si bien De Mena confía en que «a partir de ahora reaccionen después de ver la respuesta que hemos tenido todos los moteros ante esta convocatoria nacional», explica. No será hasta entonces cuando tomen nuevas medidas, a la espera de conocer la respuesta de las instituciones públicas.
El colectivo ligado al motor aprovechó la manifestación simbólica de ayer para mostrar su rechazo al nuevo carnet de motos, al que ven como «muy poco rentable», indica el portavoz.
Los más de 150 manifestantes de ayer en la capital expresaron también u oposición al nuevo impuesto de motos de alta cilindrada. La nueva propuesta de ley por parte del Gobierno, en tramitación parlamentaria, contempla la puesta en marcha de un impuesto de matriculación especial para motocicletas asociado a las emisiones de CO2 de los vehículos. Este nuevo impuesto de matriculación para motos contempla que las que emitan menos de 80 gramos de CO2 por kilómetro quedarán exentas del pago, mientras que las que desprendan entre 80 y 100 gramos pagarán el 4,75%. Las que tengan unas emisiones de entre 100 y 120 gramos afrontarán un tipo del 9,75% y, finalmente, las motos con emisiones de más de 120 gramos por kilómetro o con 100 caballos de potencia o más asumirán el tipo máximo del 14,75%.
La marcha, que cumplió las expectativas de sus organizadores, se celebró sin altercado alguno y con respeto a la velocidad legal y la distancia de seguridad.
El aparcamiento de Las Pallas fue el punto de partida de la marcha reivindicativa, para hacer después un pequeño recorrido por las calles de la ciudad hasta terminar frente al edificio de la Subdelegación del Gobierno. Hasta allí acudieron amantes del motor no sólo de Zamora capital, sino también de Benavente, Toro y otros pueblos del mapa provincial.
La protección de los guardarraíles y la instalación de sistemas de resguardo para motoristas en los actuales artilugios de contención de vehículos constituyen la bandera de la lucha del colectivo. Los conocidos como quitamiedos «mutilan y matan» a muchos compañeros, explica Julio de Mena, integrante de la plataforma motera para la seguridad, si bien las carreteras de la provincia no han registrado por el momento ninguna muerte por este motivo, «aunque sí mutilaciones», explica el motero zamorano.
La vieja reivindicación de los aficionados a las dos ruedas ha caído hasta el momento en saco roto por parte de las administraciones, si bien De Mena confía en que «a partir de ahora reaccionen después de ver la respuesta que hemos tenido todos los moteros ante esta convocatoria nacional», explica. No será hasta entonces cuando tomen nuevas medidas, a la espera de conocer la respuesta de las instituciones públicas.
El colectivo ligado al motor aprovechó la manifestación simbólica de ayer para mostrar su rechazo al nuevo carnet de motos, al que ven como «muy poco rentable», indica el portavoz.
Los más de 150 manifestantes de ayer en la capital expresaron también u oposición al nuevo impuesto de motos de alta cilindrada. La nueva propuesta de ley por parte del Gobierno, en tramitación parlamentaria, contempla la puesta en marcha de un impuesto de matriculación especial para motocicletas asociado a las emisiones de CO2 de los vehículos. Este nuevo impuesto de matriculación para motos contempla que las que emitan menos de 80 gramos de CO2 por kilómetro quedarán exentas del pago, mientras que las que desprendan entre 80 y 100 gramos pagarán el 4,75%. Las que tengan unas emisiones de entre 100 y 120 gramos afrontarán un tipo del 9,75% y, finalmente, las motos con emisiones de más de 120 gramos por kilómetro o con 100 caballos de potencia o más asumirán el tipo máximo del 14,75%.
La marcha, que cumplió las expectativas de sus organizadores, se celebró sin altercado alguno y con respeto a la velocidad legal y la distancia de seguridad.
Extraido de Laopiniondezamora.es
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